Caso Wallace – Jael Malagón Uscanga (16 sept. 2019)

Fuente: En Vero Español
Autor: Jael Malagón Uscanga
El 13 de septiembre de 2019

 

Carta de Jael Malagón Uscanga a los Medios de Comunicación

Compartimos en nuestra página la carta que Jael Malagón Uscanga, desde el CPS 11 en Hermosillo Sonora (que Gerardo Fernández Noroña en entrevista calificó como un verdadero campo de concentración de presos políticos) según el periodista dirige a la opinión pública y en particular a los medios de comunicación que siempre han favorecido a Isabel Miranda Torres o señora Wallace, hoy acusada de haber fabricado culpables e inventado el secuestro de su hijo Hugo Alberto.

Con autorización de la madre de Jael, hicimos algunas correcciones menores de estilo y ortografía, señalando que Jael escribió su carta en pesar de su incapacidad visual.  

Agosto de 2019

Honorables medios de comunicación,

Las entrevistas realizadas a la señora Isabel Miranda de Wallace, con respecto a la supuesta desaparición de Hugo Alberto Wallace, no han sido equitativas. Los acusados no hemos tenido el derecho de réplica, ni la oportunidad de defendernos públicamente de sus acusaciones difamatorias, logrando una estigmatización en contra de los acusados. Sería imposible escribir todo lo existente en expedientes; pero las violaciones al debido proceso son evidentes, y no es necesario ser experto en la materia jurídica para alcanzarlo a ver.

Permítenme suscribir 3 puntos violatorios en mi proceso. El daño es irreparable, la pena que alcanza el delito por el que nos acusan es de perpetuidad en la cárcel. Por lo tanto, debe existir plena certeza de la culpabilidad. En este caso, mis coacusados y yo nos hemos declarado inocentes del delito, no hay flagrancia del delito, no hay pruebas irrefutables del delito. Solo hay dudas, incriminaciones por dichos ministeriales sin ningún sustento.

1.- Linchamiento público.- En el año 2006, por medio de anuncios espectaculares, exhibiendo fotografías en espectaculares propiedad de la señora Wallace: enAvenida Reforma, Avenida Cuauhtémoc, Viaducto,… esas fueron algunas de las avenidas más importantes, donde los espectaculares de Showcase incitaban a los ciudadanos a denunciarnos, para que no hubiera ningún error el señalarnos y que cada quién memorizara nuestra fisonomía. Este linchamiento al estilo viejo oeste está fuera de lo legal; las autoridades lo sabían, aún así le permitieron a la señora Wallace esta violación a la presunción de inocencia. La forma correcta de proceder es que a los denunciantes se les muestre diversas fotografías, incluso de personas similares a su señalamiento para que su denuncia sea conducente, pero nunca mostrarles fotografías de manera individualizada. Esto es como decir: “Mírelo. No te equivoques y señalalo”. Incluso debe estar presente el defensor de las personas denunciadas y que están siendo exhibidas.

La intención era que no quedará como hecho aislado la versión fantasiosa de la señora Wallace y fortalecer su dicho con más denuncias. Después de toda la publicidad que nos hizo la Sra. Wallace, se pensaría que hubo una multitud de gente señalándonos. No fue así.

2.- Detención ilegal y no presentación inmediata ante el Ministerio Público.- El que suscribe, Jael Antonio Malagon Uscanga, fui detenido el 28 de diciembre del 2006, en Avenida Masarik, Colonia Polanco aproximadamente a las 11:00 a.m. y presentado a Siedo ante el Ministerio Público aproximadamente 11:00 p.m. Cabe decir que, de Polanco a las instalaciones de la Siedo en Avenida Reforma, no se hacen 12 horas de camino: por mucho y con trafico, 45 minutos. ¿Qué pasó en todo ese tiempo? Los policías aprehensores se comunicaron con la señora Wallace. Todo el tiempo, estuvimos en ese sitio donde me detuvieron, hasta que llegó Isabel Mirandaen compañía de todas sus escoltas a repartir sus famosas recompensas. La señora Wallace me preguntó donde estaba Jacobo Tagle, y le contesté: le dije que no sabía. En ese momento me achacan “droga”, metanfetaminas y marihuana como no había una orden de aprehensión en mi contra; me “siembran” la droga para arraigarme 90 días y así incriminarme. Ya en el arraigo fui sometido a la cámara de Gesell o de confrontación. Aquí, al igual que en los espectaculares, entré “yo solo” a la cámara. Si todo hubiese hecho legalmente, hubiera sido como lo vemos en películas, que pasan tres o más personas incluso parecidas, para que la víctima del delito señale sin temor a equivocarse, y que el reconocimiento sea contundente; pero en mi caso no fue así. Provocando un señalamiento indebido en mi contra y otra violación grave, la señora Wallace le mintió al juez diciéndole que ella no estuvo en el momento de mi detención, que incluso estaba fuera del país. Constantes y frecuentes mentiras: en este sitio había periodistas, medios de comunicación, civiles y autoridades. Pero la señora Wallace ha podido mentir a la autoridad sin ninguna repercusión, si los policías me hubieran presentado inmediatamente y sin demora como lo indica la Ley, no me habrían incriminado sembrándome “droga” y por la cual recibí 11 años de cárcel. Esto es una detención ilegal y una dilación a la inmediatez de presentar a un detenido ante el Ministerio Público.

3.- Las torturas.- En todos los casos de los acusados por la Sra. Wallace existe la tortura, golpes, violaciones, amenazas, pero sin exagerar, algunas fueron dignas de prisioneros de guerra. Juana Hilda González Lomelí fue la primer detenida. Cuando la torturaban y violaban sexualmente dentro de una camioneta de la AFI, chocaron. Un agente perdió la vida y Juana Hilda sufrió múltiples lesiones en adición a las amenazas de muerte contra sus familiares. La novia, hermana, madre y abogada de Cesar Freyre Morales, todas fueron presas por influencia de la señora Wallace. Ya en prisión, soy testigo que la única civil que ha entrado al penal del Altiplano para torturar y amenazar a Freyre fue Isabel Miranda de Wallace. Las cámaras del penal fueron testigo del ingreso de la Señora. A Cesar, lo han sacado del penal en helicóptero y colgado de los pies. Todo esto ha sido denunciado en su momento, pero al ver que las denuncias no procedían y la señora Wallace demostraba su inmunidad y poder, Freyre ha firmado documentos ajenos a la verdad para salvaguardar su integridad y la de su familia. Tony y Alberto Castillo Cruz fuerondetenidos cuando voluntariamente se presentaron a declarar*. Por amenazas de muerte han tenido que solicitar estar en penales y módulos de máxima seguridad.

*Rectificación En Vero: Tony Castillo Cruz fue quién se presentó voluntariamente para declarar pocos días después de que su hermano Albert Castillo Cruz fue privado de su libertad por Miranda Torres y su hermano Roberto el 7 de marzo de 2006.

Brenda Quevedo Cruz fue violada sexualmente y golpeada para obligarla a declarar, dentro del penal de Santiaguito por un individuo empleado y cómplice de la señora Wallace, provocándole serias lesiones en sus órganos sexuales. Por medio de peritos especializados y realizándole la prueba “de Estambul” ha demostrado a la tortura que Jacobo Tagle Dobin fue sometido al recibir descargas eléctricas en sus testículos. Actualmente en su próstata la tiene destrozada debido a las golpizas que sufrió para obligarlo a declarar y a decir el paradero de Hugo Wallace. Su hermano menor fue enviado al tutelar y a su madre la despojaron de su vivienda donde cabe señalar que Hugo Alberto Wallace era copropietario de un terreno dentro de la misma vivienda.

Jael Antonio Malagon Uscanga, el que suscribe, fui testigo de la detención de mi exesposa y de que dejaron sin su madre a mi hijo entonces de cuatro años, eso fue la mayor tortura psicológica. La señora Wallace amenazó a mi madre diciéndole que no le pisara la cola al perro, que el problema no era contra mí, en la salas de juzgados. De improviso, me mandó llamar la señora Wallace: me pidió que declarará contra Freyre y que, a cambio, ellame ayudaría a salir libre. Me cuestionó por mi aseo personal y como le hacía yo para estar tan limpio. Esto provocó que fueran a fotografiar y video grabar las condiciones en que vivía dentro de la celda y comprobar que no contaba con ningún beneficio. Al poco tiempo, internos me agreden golpeándome y pidiéndome (sic.) sin motivo por la espalda, intentando cegarme definitivamente, provocándome un desprendimiento de retina y múltiples lesiones. Al cuestionarlos sobre el porqué de la agresión, mencionaron que había dinero de por medio. Tenemos el conocimiento que internos y autoridades se han contactado con la señora Wallace, para ponerse a su orden y provocarnos daño y el peligro de un ataque es vigente.

De estos tres puntos violatorios y todo lo que refiero, hay pruebas y obran en expedientes. He tratado de explicar lo sucedido después de este tipo de tortura. Hemos visto a grandes capos y delincuentes confesar sus crímenes. La razón de que Hugo Alberto Wallace no aparece, que no haya ni el más mínimo rastro, es que los acusados no fueron sus victimarios. Que realicen pruebas periciales especializadas y se comprobará que la versión de la señora Wallace no corresponde a la realidad. Si en algún momento los acusados han ratificado esta versión falsa es por el temor a las torturas y amenazas que como sea se ha señalado desde el principio de mi carta, hasta la actualidad son vigentes.

Es importante enfatizar que el que suscribe, no está citado a proceso de la desaparición de Hugo Alberto Wallace, pero esto no ha evitado que la señora Wallace por ser amigo de los acusadoresme incrimine. El fiscal Braulio Robles conocido como falsificador públicamente, al falsificar sus tesinas para ser fiscal anticorrupción de la nación, esta persona a la orden de la señora Wallace, cimentó todo mi expediente. Al observar que los espectaculares no generaron señalamientos traía mi fotografía como propaganda, en bases de víctimas con trucos consiguió un señalamiento mostrando mi fotografía, pero el señor que me señaló a través de la fotografía ha señalado a diferentes personas pensando que soy yo. Teniéndome enfrente, el señor no pudo señalarme con contundencia. Tenia que ser un testigo falso e inducido. La señora Wallace en la actualidad sigue hablando de mi difamándome públicamente. Dice que soy reincidente y que me balearon en los cabos en replica. Pareciera que quiere justificarse por todo el daño que me ha hecho fragmentando mi pasado. Si tuve un problema legal anteriormente o si atentaron contra mi vida, no por esto me puede imputar delitos que no he cometido ni sembrarme droga.

Jael Antonio Malagón Uscanga